El sistema responde al nombre de Simple and Compact IVC Unit. Si bien no es el primer dispositivo que vemos para la comunicación entre vehículos, si es uno de los más pequeños ya que mide 50mm x 57 mm x 26 mm.
Desde OKI explican que han podido reducir el tamaño porque integra los componentes que antes se desplegaban externamente, como antenas para la comunicación entre vehículos, LEDs/Buzzers que muestran el estado de varios servicios, un receptor de señal GPS y un sensor giroscópico.
La compañía explica que con estas mejoras ha sido posible minimizar el tamaño hasta conseguir que ocupe once veces menos que un dispositivo convencional. Gracias a esta reducción de las dimensiones es posible colocar el dispositivo en la parte superior del salpicadero del vehículo o en el parabrisas.
Los usos de esta tecnología son variados, por ejemplo, el conductor podrá notificar a los demás vehículos su posición exacta desde el GPS integrado, y recibir a la vez su localización gracias a la función de comunicación entre vehículos.
Además, podrá avisar con antelación de cuando la posición de un vehículo o de una persona puede provocar un accidente de tráfico.
Este tipo de aparatos llevan tiempo desarrollándose en Japón, con el objetivo de aumentar la seguridad del tráfico.
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