Cuando recargar la batería del móvil puede terminar en una infección por malware

Si creías que andarse con ojo a la hora de pagar con tarjeta o sacar dinero de los cajeros bastaba para blindar tu seguridad en caso de que te encuentres estos días en Brasil disfrutando del Mundial de Fútbol, estabas equivocado.

Los ataques de ciberdelincuencia pueden llegar, incluso, mientras recargas la batería de tu teléfono móvil.

Así lo advierte Kaspersky Lab, que recomienda no utilizar puntos de recarga ubicados en lugares públicos, sobre los que no se conoce exactamente quién puede estar detrás de su gestión. Y es que, “de forma silenciosa, el ciberdelincuente puede robar la información almacenada en el smartphone durante la carga, a través del puerto USB”, señala esta compañía.

Otro riesgo asociado es la instalación de malware en tu terminal que después sería capaz de dar acceso al contenido privado del smartphone o incluso habilitar el rastreo de la localización exacta del usuario.

Más allá de los procesos de carga, también están bajo sospecha las propias conexiones a Internet vía Wi-Fi.

Según datos recabados por Kaspersky, sólo 6 de cada 10 puntos de acceso SSID existentes en una ciudad como São Paulo estarían ocultos. Y, aunque algo más de la mitad las redes inalámbricas ofrecerían un sistema WAP2, la cuarta parte es totalmente abierta y gratuita, lo que pone en riesgo a los internautas que confíen en ellas.