Cuatro de cada diez europeos son alfabetos en nuevas tecnologías

Este dato se ha puesto de relieve durante una cumbre europea sobre empleabilidad celebrada en Barcelona.

Por el momento nadie se ha pronunciado sobre si el hecho de que cuatro de cada diez europeos sean albafetos en nuevas tecnologías sea malo o bueno. En mis tiempos de estudiante esto era un suspenso, cercano al aprobado, pero suspenso. Claro que habría que valorar qué se entiende por “alfabeto en nuevas tecnologías”, qué debe saber un europeo para pasar el listón y ser uno de esos cuatro.

Parece que la cumbre europea de ONG especializadas en empleabilidad a través de la informática celebrada en El Prat de Llobregat (Barcelona) se ha centrado en estudiar cómo Internet puede ayudar a las personas con riesgo de exclusión social a encontrar trabajo. También se ha anunciado una iniciativa de la Unión Europea en el ámbito de la inclusión social para el año 2008 que pretende reducir el nombre de personas que sufren “la brecha digital”, que afecta a 3 de cada 4 europeos mayores de 65 años.

La cumbre reunió a responsables de 16 ONG de 14 países de Europa líderes en el sector de la formación en conocimientos informáticos y que ayudan a construir puentes entre la formación y la obtención de un puesto de trabajo.

Entre los asistentes al evento, que tuvo lugar en el Centro Esplai, destacó la presencia del representante de la Comisión Europea en materia de empleabilidad, André Richier; el director de ‘telecentre.org’, Mark Surman; y la directora de Microsoft para Europa, Oriente Medio y África, Sylvie Lafarge.

La cumbre ha sido también un espacio de diálogo en el que las organizaciones han podido discutir y compartir sus experiencias y los métodos de trabajo más eficaces para lograr sus objetivos.

En la misma línea, han analizado cómo las entidades sin ánimo de lucro pueden encontrar nuevas vías de financiación para desarrollar sus iniciativas.

La cumbre –promovida por Microsoft, la Fundació Esplai y Telecenter.org– ha sido una apuesta por “el incremento de la empleabilidad de quienes en Europa han estado tradicionalmente excluidos de la economía del conocimiento” afirmaron los organizadores