Decálogo del buen cloud computing

Mucho se viene hablando los últimos años sobre los servicios de cloud computing como una propuesta de valor para los servicios informáticos de las pequeñas y medianas empresas, sin embargo, todavía hay cierta desconfianza por la novedad del mismo y la asociación a elevados costes que tiene, además de por el continuo uso del término cloud computing para todo.

Por soluciones cloud se pueden entender todas aquellas en las que no sea necesaria una centralización a nivel de hardware o de recursos y que nos permitan dar un servicio web global con independencia al sector al que pertenezcamos.
Asimismo, el término cloud no tiene por qué estar encasillado en macro soluciones para las corporaciones, si no necesidades puntuales de proceso masivo, que por ejemplo pueda necesitar una productora de cine. Es mucho más que eso, es la unión y evolución de todas las tecnologías que llevan creciendo desde que el Sr. Berners dio el primer paso para crear la red de redes.

Hasta hace relativamente poco, toda la oferta que se conocía sobre servicios cloud computing era un tanto limitada, panorama que ha cambiado desde hace más de un año en el que numerosas empresas se han lanzado a ofrecer servicios de cloud computing que nos lleva a preguntarnos por la reglas que rigen el buen servicio de computación en la nube. Así pues, lanzamos un modesto decálogo del “buen cloud computing”:

1 – El cloud computing es un servicio válido y adaptable para todo tipo de empresas, ya sean las más tradicionales o las más innovadoras, así como pymes o grandes corporaciones, ya que son servicios escalables y 100% flexibles.

2 – La inversión constante en nuevos equipos para mejorar la capacidad, potencia, flexibilidad y fiabilidad corre siempre a cargo del proveedor del servicio, ya que la atención al cliente es una de las prioridades en este tipo de servicios y es obligación del proveedor, permanecer al tanto de las últimas actualizaciones tanto de software como de hardware. Es más, muchas de las soluciones de cloud actuales son uniones de componentes de distintas redes antiguas.


3 –  Se debe ofrecer al cliente la libertad de elegir la plataforma y software a instalar. En una instancia de cloud es posible que se quiera meter dominios y hosting, pero también es posible que se quiera incluir una aplicación, en este caso, es realmente una chapuza que se obligue al cliente a tener un panel de control sí o sí.

4.-La capacidad de redimensionamiento de las instancias debe estar disponible bajo demanda y en el momento, es decir,  se tienen que poder aumentar memoria sin dependencia de un tercero y con posibilidad de actualización en el momento para cubrir necesidades puntuales.

5.- Para efectos de lo anterior, el proveedor de servicios cloud computing debe apostar  por soluciones SaaS  o IaaS  simples, que sean de  fácil uso e implementación, mediante un interfaz intuitivo que el cliente pueda manejar pero que no le supongan agregados en sus labores.

6.-  Se debe contar con un conjunto de medidas y medios para hacer que el servicio que se quiera albergar pueda tener una disponibilidad total que pasa por gestionar herramientas de acceso a los servicios, así como ofrecer otras para monitorizar los mismos.

7.- Es totalmente imprescindible contar con un servicio técnico físico de 24 horas, los siete días de la semana. No tiene sentido alguno tener un problema un viernes a las 22 horas,  y que éste no pueda ser solucionado hasta el lunes siguiente, dejando sin servicio al cliente.

8.- Es también de vital importancia para efectos de confianza, seguridad y transparencia en el servicio, contar con data centers donde la información de los clientes esté ubicada y huir de las ubicaciones de difícil localización.

9.- El proveedor debe prestar especial atención a las cuestiones que más preocupan al cliente como: gestión de los datos, seguridad, confidencialidad, así como un correcto cumplimiento normativo y regulatorio para lo que un buen proveedor tiene que cumplimentar normas como:

*Control de los datos de los diferentes clientes, confidencialidad de los mismos y gestiones separadas, así como controles registrados.

*Cumplimiento de las leyes y normativas aplicadas a datos.

*Protección probada ante errores de operación que puedan afectar a los datos y servicios, así como una redundancia de los mismos ante posibles fallos.

10.- Finalmente hay que desmitificar la idea de que un buen servicio de cloud computing implica un elevado coste. Dada su implementación y escalabilidad, si algo caracteriza este tipo de servicio es lo rentable que puede ser ya que una de sus principales premisas, reside en el ahorro de costes. Es más, no se trata de un servicio caro, si no de los más baratos a corto plazo.

Diez consejos que te ayudarán a elegir un buen proveedor de servicios cloud computing, tendencia que se presenta como la  gran apuesta para las empresas.