Inversiones millonarias para ofrecer servicios en 'la nube'

Compañías como Google, Facebook o Microsoft gastan miles de millones de dólares en mantener centros de datos para que los usuarios guarden, compartan y disfruten de sus contenidos.

Los servicios de correo electrónico como Gmail, Yahoo! o Hotmail permiten a los usuarios almacenar grandes cantidades de emails con ficheros y fotos adjuntas que pueden descargarse desde cualquier ordenador con conexión a Internet. Para que esto sea posible, los datos tienen que estar guardados en Internet, es decir, están en ‘la nube’.

La computación en la nube o cloud computing permite a las empresas ofrecer servicios en Red sin que los usuarios tengan que descargarse software sus equipos ni ocupar espacio de sus discos duros, pero esa información está almacenada en los centros de datos de las empresas. El desembolso que supone para una empresa mantener un parque de servidores activo para guardar toda la información alcanza cifras desorbitadas que superan los miles de millones de dólares.

Por ejemplo, Google , que ofrece servicio web mail, traductor, telefonía, calendarios, documentos, mapas, fotos, y un sinfín de productos online, han obligado al gigante de Internet a invertir unos 2.300 millones de dólares en instalaciones, hardware de almacenamiento y servidores.

Microsoft , por su parte, también dedica gran cantidad de capital a sostener la nube. En concreto, los de Redmond invirtieron en instalaciones completas de centros de datos unos 500 millones de dólares.

En este contexto, donde la computación en la nube está en auge, redes sociales como Facebook están requiriendo cada vez más espacio y nuevos servidores, aunque todavía no superan a Google o Microsoft. Como publica EP, la red social de Mark Zuckerberg sólo invierte en servidores el 3,5% de lo que dedica Google a sus centros de datos, aunque su meteórica expansión ha forzado a los responsables a aumentar sus inversiones, que este año crecerán un 60%. Se calcula que en 2009

Facebook dedicará entre 20 y 25 millones de dólares en infraestructura de almacenamiento.