La Comisión Europea (CE) comenzará a investigar las denuncias sobre un acuerdo fiscal entre Luxemburgo y Amazon, donde la compañía estadounidense tiene fijada su sede central europea, que ha permitido al gigante del ecommerce beneficiarse ilegalmente de una rebaja de impuestos durante casi una década.
“Los investigadores creen que Luxemburgo dio a Amazon condiciones favorables en un acuerdo fiscal sellado en 2003, limitando el impuesto del Gran Ducado a menos del 1% de la renta europea”, tal y como han afirmado fuentes cercanas al asunto a The Financial Times.
El acuerdo se cerró antes de que Amazon estableciera su centro de operaciones en Europa en Luxemburgo.
La CE abre ahora una investigación formal en profundidad sobre sus serias preocupaciones en torno a estas ayudas estatales ilegales, lo que sitúa a Amazon en el mismo punto de mira que otros escrutinios fiscales, como el de Apple en Irlanda y Starbucks en los Países Bajos.
Todos los países y empresas sujetas a estas averiguaciones han rechazado que haya habido ‘cualquier arreglo’. En declaraciones anteriores Amazon ha afirmado que “paga todos los impuestos aplicables en cada jurisdicción en la que opera”.
Algunos políticos irlandeses han manifestado que las acusaciones de ayudas estatales son una forma de Bruselas de inmiscuirse en la política tributaria soberana de los estados miembros.
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