La junta de France Telecom delibera el futuro de su CEO

El futuro del presidente ejecutivo de France Telecom, Stephane Richard, permanece en suspense desde que el pasado lunes se procediera a su detención preventiva por un posible caso de fraude durante su etapa como asesor.

La investigación judicial puesta en marcha contra Richard pretende aclarar el papel del CEO en el caso de arbitraje entre el empresario Bernard Tapie y el banco francés Crédit Lyonnais.

Se estudia la posible ilegalidad de la indemnización de 403 millones de euros que cobró Tapie.

La junta directiva de France Telecom, el cuarto mayor grupo de telecomunicaciones de Europa, cuyo 27% es aún propiedad del estado francés, se reunirá en los próximos días para discutir el destino de Richard.

El veredicto que ofrezca el gobierno del presidente Francois Hollande probablemente determinará el resultado, a pesar de que el estado sólo tiene 3 de los 15 asientos en la ejecutiva, según fuentes citadas por Reuters.

El ministro de Economía Digital, Fleur Pellerin, ha manifestado que el gobierno debe decidir “si la decisión del juez (de ponerlo bajo investigación) supone un problema para que Richard permanezca en su cargo“, y ha agregado que las conversaciones entre los miembros de la junta están en curso. “Se trata de valorar si la decisión judicial le ha deshabilitado”, ha explicado Pellerin.

Por su parte, Stephane Richard ha negado las acusaciones y France Telecom no ha querido hacer comentarios.

Hasta el momento los inversores de la compañía se han tomado con calma este asunto, que no parece estar afectando demasiado al grupo en la bolsa.

France Telecom acaba de anunciar un nuevo paso estratégico, adoptando la marca Orange para todas sus operaciones. El objetivo es convertirse en un actor global en la era digital y proyectar su evolución financiera.