La mitad de las aplicaciones acumula deudas en seguridad

Veracode revela que la prevalencia de las vulnerabilidades se ha incrementado un 11 % en la última década, aunque han ido retrocediendo las de alta gravedad.

Hoy por hoy, corregir vulnerabilidades de seguridad es una parte tan importante para el proceso de desarrollo de aplicaciones empresariales como la mejora de la funcionalidad.

Así lo resuelve Veracode a través de una nueva edición de su informe sobre el Estado de Seguridad del Software, en el que se demuestra que los desarrolladores están cambiando de actitud. “En los últimos 10 años”, dice Chris Wysopal, cofundador y CTO de Veracode, “hemos visto una gran mejora en el estado general de la seguridad de las aplicaciones”. Sin ir más lejos, “hemos pasado de tener que discutir por qué dicha seguridad es importante, a tener conversaciones sobre la mejor manera de abordar el problema”.

“Este cambio se refleja en los datos que muestran que las empresas están solucionando un mayor porcentaje de fallos que nunca”, destaca Wysopal. En concreto, más de la mitad de los fallos, un 56 %, están solucionados.

“La prevalencia general de las vulnerabilidades aumentó un 11 % desde que lo reportamos por primera vez hace 10 años, pero la proporción de las que se han evaluado como de alta gravedad cayó un 14 % durante el mismo período. Los datos muestran que es muy probable que los desarrolladores sean quienes se den cuenta y corrijan los fallos de esta categoría, por lo que existe una evidencia sólida de que los equipos de desarrollo están mejorando para determinar qué fallos son los más importantes para solucionarlos primero”, detalla Chris Wysopal.

“Sin embargo, el informe también nos revela que hay mucho margen de mejora, específicamente cuando se trata del tema del aumento de la deuda de seguridad. Al igual que las deudas en las tarjetas de crédito, haciendo pequeños gastos de forma recurrente se puede acumular una gran deuda”, compara el director de tecnología de Veracode.

Esta deuda tiene que ver con abordar los nuevos errores y acumular los antiguos. Desde Veracode explican que, cuanto más tiempo esté activa una vulnerabilidad, menos posibilidades de que se acabe corrigiendo. De hecho, la mitad de las aplicaciones acumula con el tiempo deudas. De la otra mitad, una cuarta parte las está reduciendo y la otra cuarta parte se sitúa en un punto de equilibrio.

La frecuencia con la que se escanea una aplicación impacta en esta deuda de seguridad. Las que se escanean menos de una vez al mes tiene un tiempo medio de resolución de 68 días; mientras si el escáner diario, se tardan 19 días.

“Los equipos de desarrollo no pueden ignorar los fallos ni elegir reparar los nuevos en lugar de los antiguos. En su lugar, deberían hacer un plan para arreglar los errores más actuales y usar ‘sprints de seguridad’ periódicos para corregir fallos no resueltos que podrían ser atacados”, recomiendan desde Veracode.

Lo bueno es que un 70 % de los equipos de desarrollo reduce ya el número de errores tras un primer escaneo o consigue no introducir otro nuevo. Hasta un 83 % de las aplicaciones tiene al menos un error en el escaneo inicial.

En cuanto al tipo de quebraderos de cabeza a los que se enfrentan los desarrolladores, los más frecuentes son la filtración de información (64 %), los problemas criptográficos (62 %) y la inyección de CRLF (61 %).