“La nueva normativa afectará a la compras de tecnología en 2024”

Pure Storage Iberia comparte sus previsiones sobre lo que dará de sí el nuevo año.

La inteligencia artificial (IA) será una de las tendencias a seguir durante 2024 en el entorno empresarial. Su repercusión se dejará notar en diferentes ámbitos. Pure Storage Iberia prevé, por ejemplo, que “la demanda de soluciones de IA generativa provocará un nuevo aumento en la adopción de los contenedores” este año.

“Para hacer frente a las exigencias de la IA, los científicos de datos y los desarrolladores necesitan una plataforma ágil que les permita seguir el ritmo de las demandas empresariales”, explica Carmen Derlinchan, directora sénior de ingeniería de sistemas en esta compañía. Así, “cada vez más, Kubernetes y contenedores son vistos como la plataforma ideal para este fin”.

Tras las fases stateless y stateful, se impondrá otra en la que los contenedores habilitarán tanto el canal de datos como las cadenas de herramientas de IA. Estas herramienta se empaquetan en contenedores, al igual que la soluciones que permiten realizar tareas como tratar, limpiar y amplificar datos antes de proceder al entrenamiento de grandes modelos de lenguaje.

Pure Storage lanza otras previsiones para los próximos meses, como que “la nueva normativa afectará a la compras de tecnología en 2024″, que “el consumo y los costes energéticos acelerarán el cambio CapEx a OpeEx” y que se experimentará un “aumento de la demanda de mayor eficiencia e innovación en los centros de datos para evitar la saturación de la capacidad”.

Sobre los cambios normativos, destacan aquellos que tienen que ver con la seguridad y la sostenibilidad. Es el caso del Reglamento sobre la Resiliencia Operativa Digital (DORA) de la Unión Europea para reforzar el sector financiero ante incidentes vinculados a las TIC. O el de la Directiva sobre Información Corporativa de Sostenibilidad Corporativa (CSRD), que endurece las reglas sobre aquellas comunicaciones que las empresas tienen que realizar.

Ante este panorama, “las organizaciones deben realizar un análisis exhaustivo de todos los activos tecnológicos antes de comprometerse a una compra”, señala Carmen Derlinchan, “porque saben que al final tendrán que informar de sus decisiones y no quieren que las sorprendan con una infraestructura ineficiente y derrochadora”.

“Los proveedores de tecnología tienen que ser claros respecto del cumplimiento normativo de sus productos y soluciones, tanto ahora como en el futuro”, subraya. “Aquellos que demuestren unas sólidas credenciales en materia de sostenibilidad, tendrán una ventaja competitiva”.