La fusión se irá haciendo poco a poco, relativamente, y de una forma razonable, para que al final el usuario tenga todo lo bueno de las dos redes. En principio, se podrá acceder con la clave y la contaseña en la otra web, aunque poco a poco iremos creando nuevos puentes.
ICTnet es una red que, desde el momento mismo de su fundación, estuvo ligada al Instituto Catalán de Tecnología y al COECIC. ¿Se mantendrá esta relación o será a partir de ahora completamente independiente?
Nosotros compramos ICTnet, por lo que está claro que tendrá una vinculación del 100 por cien con Viadeo. El interés de la Administración era el de mantener los servicios de la red y una alianza con nosotros lo impulsa mucho más lejos, gracias a nuestros recursos en el terreno online.
Además de la compra, hay una gran alianza de relación de confianza con el COECIC. De hecho, y por poner un ejemplo, se mantendrán las mismas oficinas.
Tras esta adquisición, ¿Viadeo se sitúa en una posición de predominio o queda aún mucho por hacer?
Queda mucho por hacer. Cuando llegamos hace año y medio, teníamos el mismo cometido que tenemos ahora. Aunque se puede comparar, nuestra intención es no seguir a otros, sino hacer nuestro propio camino, por lo que el aspecto competencia no nos preocupa especialmente. Bien es cierto que, con esta fusión, tenemos una situación privilegiada.
En el mercado español, somos líderes en ingresos. Queremos una empresa rentable, con más inversiones y con desarrollo extendido, para lo que este liderazgo es clave.
Da la impresión de que los empresarios españoles no utilizan las redes sociales en demasía, ¿cuáles son los beneficios principales que estas herramientas pueden ofrecerles?
Todos los empresarios las utilizan, pero no emplean las asociadas a internet. Todo empresario tiene una agenda, de hecho es importante mantener el contacto con amigos, con competidores, con clientes o con compañeros de carrera. La gestión se hace a través de una agenda con tarjetero o del típico Outlook, pero estas tarjetas están muertas, fijas en el pasado, lo que dificulta que el dueño de la agenda conozca los cambios.