A raíz de una denuncia que FACUA presentó en octubre de 2006, ONO ha sido multada por la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid con 53.000 euros. La sanción obedece a las penalizaciones ilegales de 139,20 euros que la operadora cobró a los usuarios que decidieron dar de baja el servicio de forma anticipada.
El Gobierno madrileño consideró que ONO introdujo una “cláusula abusiva” al exigir dicho pago, aún cuando el contrato no estipulaba ningún tipo de sanción por la baja del servicio. De esta manera, el expediente determinó que la operadora violó el artículo 86 de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, que regula “la limitación o exclusión de la facultad del consumidor y usuario de resolver el contrato por incumplimiento del empresario”.
Cabe destacar que, según fuentes consultadas por Europa Press, ONO presentará un recurso contra la resolución.
De todas formas, FACUA ha destacado que, tras las reclamaciones efectuadas al operador, la empresa ha devuelto el dinero cobrado ilegalmente a varios usuarios e incluso canceló facturas en las que exigía el pago de las penalizaciones.
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