Primeras impresiones sobre el nuevo MacBook Air: el portátil ideal, aunque falto de potencia

Cabría reconocer que probablemente quien adquiera uno de los nuevos MacBook Air pensando en editar vídeo profesional en resolución 4K no ha elegido bien el modelo y debería decantarse por el MacBook Pro. Igualmente quien necesite conectar distintos dispositivos al mismo tiempo encontrará aún más limitaciones que en el anterior modelo con pantalla de 11 pulgadas, que apenas ofrecía dos puertos USB y un Thunderbolt. La inclusión de un único puerto USB-C en el nuevo MacBook de 12 pulgadas tiene sus pros y sus contras.  Algunos de ellos curiosamente han sido alabados de manera indistinta como positivos y negativos.

Y es que ese único puerto sirve indistintamente para conexión de dispositivos pero también para recargar la batería, de manera que en ocasiones será necesario disponer de algún concentrador USB si no queremos estar enchufando y desenchufando.

Su diseño, minimalista al máximo (insistimos, un único conector además del jack de auriculares), ha sido alabado como el modelo a seguir por los diseñadores en el futuro, pero también se trata de una reducción a lo esencial que no todos los usuarios sabrán aceptar.

También habrá que aceptar que aunque los nuevos MacBook Air podrán asumir a la perfección el 75 % de las tareas que la mayor parte de los usuarios requerirán habrá tareas más exigentes con el procesador Intel Core M en las que el rendimiento decae y se ralentiza el funcionamiento.

Este ordanador, por cierto, para algunos analistas resulta obtener un discreto rendimiento en cuanto a la gestión de las necesidades energéticas, ofreciendo una autonomía que podría resultar escasa para quienes se ven obligados a pasar muchas horas lejos de un enchufe, aunque en algunos medios ha habido analistas que sí se han manifestado muy satisfechos con la autonomía conseguida por el portátil e incluso con su rendimiento utilizando programas como Photoshop o Final Cut Pro.

Muchos agradecerán el silencio en que es capaz de trabajar el ordenador gracias a la ausencia de ventiladores y el rediseño de las rejillas de aireación, y desde luego quienes escriban mucho estarán encantados con el nuevo teclado, con teclas cuyo tamaño individual ha crecido y cuyo conjunto también lo ha hecho, llenando prácticamente todo el espacio disponible hasta los laterales.

Para algunos lo más negativo sería el elevado precio del MacBook de 12 pulgadas, nada menos que 1.299 € que contrastan con los 999 € que cuesta el modelo de 11 pulgadas.

vINQulos

Cnet

The Verge

The Wall Street Journal

TechCrunch

Yahoo