Protestas contra la publicidad en YouTube

La política de lanzar un servicio gratuito, libre de publicidad y cuando llega a la cima convirtiéndose en un estándar de facto comercializar el mismo, está levantando ampollas a los habituales de YouTube, que amenazan con marcharse a otros sistemas de videos en Internet.

Claro que era difícil esperar otra cosa cuando Google pagó la friolera de 1.650 millones de dólares por su adquisición y muchos se preguntaban como rentabilizaría esa inversión. Parece que la publicidad es la única fórmula y después de un año, su inserción supone un claro cambio de estrategia en busca de un nuevo negocio.

Al contrario que los usuarios, los analistas consideran que la medida es poco agresiva y equilibrada entre las molestias que puede ocasionar a sus usuarios y lo que los anunciantes están dispuestos a pagar, además de posibilitar una mejora del servicio. En concreto, cada 1.000 visitas Google recibe 20 dólares.

Quizá la firma deba replantearse el formato elegido para su inserción considerado por los usuarios como “demasiado invasivo”, aunque el banner aparece solo en los videos patrocinados – no en los particulares – 15 segundos después de iniciado el video, dura solo 10 segundos y además se puede cerrar.

De momento para los usuarios del navegador Firefox ya ha aparecido una extensión llamada TubeStop que dice eliminar los anuncios de los videos de YouTube sustituyendo el reproductor flash.

Veremos que hace Google para mantener el servicio y satisfechos a sus más de 100 millones de usuarios, aunque para recuperar 1.650 millones de dólares…

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