S-LCD, una joint venture entre Samsung Electronics y Sony creada hace cinco años para la producción de pantallas de cristal líquido (LCD), ha anunciado la puesta en marcha de su nueva planta ubicada al sur de Seúl. La fábrica demandó una inversión de 1.460 millones de dólares (unos 1.000 millones de euros).
La nueva línea de producción utilizará motherglass de octava generación (8G) en la fabricación de pantallas de LCD para televisores de marcas como las propias Samsung y Sony, según explicó la compañía en una nota de prensa reproducida por Reuters. Se conoce como motherglass a la plancha de vidrio sobre la cual son cortados los paneles.
La fábrica inaugurada es la segunda planta 8G de S-LCD. La empresa planea alcanzar una producción mensual de 70.000 paneles al final del año. Cabe destacar que Samsung y Sony son los principales productores de televisores de LCD del mundo.
La caída de los precios ha permitido que la venta de televisores de pantalla plana se mantenga en buen nivel pese a la crisis económica internacional. Los analistas consideran que la decisión de China de subvencionar la compra de productos electrónicos en zonas rurales también ha ayudado a impulsar la demanda.
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