Partidos políticos y redes sociales en la era 2.0

Las redes sociales se han convertido en una nueva arena en la que los partidos políticos se disputan el apoyo ciudadano. ¿Qué uso dan a estas plataformas?

Las elecciones municipales y autonómicas del 24-M aún están ‘calientes’, con los partidos políticos inmersos en conversaciones para decidir buena parte de las alcaldías y presidencias regionales.

En esas negociaciones es fundamental el peso relativo conseguido en las urnas gracias al apoyo de los ciudadanos. ¿Pero qué hacen los partidos para granjearse su confianza? En un momento en el que la política está tan desprestigiada, se esfuerzan en mejorar su imagen, mostrándose más cercanos y transparentes. Pese a ello, el ciudadano los sigue percibiendo lejanos, ajenos a sus preocupaciones reales.

Facebook, Twitter o Instagram son un escaparate para que los partidos se comuniquen con quien quiera seguirles. Además, permiten la interacción de los ciudadanos, introduciendo la bidireccionalidad en la comunicación política.

Por otra parte, el 15-M marcó un antes y un después. Al igual que sucediera en las sucesivas ‘primaveras árabes’, las redes sociales jugaron un papel importante en el seguimiento y difusión de las oleadas de protestas y el movimiento de los ‘indignados’.

Repasamos cómo utilizan las redes sociales los partidos con implantación nacional para relacionarse con los ciudadanos

Partido Popular

Tiene presencia en Facebook (cerca de 95.000 ‘likes’ en su página), Twitter (263.000 seguidores), YouTube (más de 6 millones de reproducciones) y Flickr. Mariano Rajoy es el más seguido en Twitter (816.000 followers), tuiteando y retuiteando con bastante frecuencia. Su página de Facebook dispone de 132.000 ‘likes’. También tiene un buen número de seguidores en la red de microblogging Esperanza Aguirre (329.000), aunque es bastante menos activa. Y en Facebook cuenta con más de 130.000 fans.

Además, el partido dispone de la plataforma Popular.es, punto de encuentro, participación y puesta en común de ideas y opiniones de los afiliados. Por otro lado, en 2010 puso en marcha ‘Blogosfera Popular’, proyecto que murió de inanición por la escasez de post publicados.

Su actuación en redes sociales se limita casi exclusivamente a ejercer de altavoz de datos económicos, declaraciones de sus miembros en medios de comunicación, agenda, etc., pero la relación con los usuarios es escasa, desaprovechando la bidireccionalidad y cercanía que facilitan las redes sociales.

El partido no nos ha contestado acerca de su concepción y estrategia en redes sociales, por lo que no podemos informar con más detalle acerca de sus objetivos y modo de empleo de estas plataformas o de la coordinación de la actividad de las organizaciones regionales y locales del partido o de sus miembros.

PSOE

Está en Facebook (cerca de 93.000 ‘me gusta’), Twitter (254.000 seguidores), Pinterest, Google+, Youtube (casi 7 millones de reproducciones), Flickr y SoundCloud. Además, cuenta con plataformas como RedBlog -donde cuelga habitualmente información y entrevistas-, miPSOE.es –donde recoge ideas y fomenta el debate de los ciudadanos, sean o no afiliados- o Voluntari@s en Red –comunidad para extender los valores del partido en internet y promover el debate-.

“Todas son distintas y las trabajamos de un modo diferente. Twitter es mucho más inmediata y buscamos el titular o un comentario muy específico y concreto o alguna imagen que resuma nuestra propuesta. Y damos respuesta a la gente que nos pregunta”, explica Álvaro Gil, community manager del PSOE. “Facebook tiene más análisis y reflexión porque hay más espacio para plantear propuestas o hacer encuestas. También colgamos links a la web o a donde se facilite información sobre los temas que plantea el partido. Al mismo tiempo, la comunidad entra en debate. Google+ es parecida a Facebook”, añade.

Además, el partido está apostando por WhatsApp como canal de comunicación. “Intentamos enviar cada día la propuesta más importante del partido, el vídeo más destacado, fotos, infografías o memes que ilustren las propuestas, etc. Y también hay una comunicación bidireccional. Se escucha a los ciudadanos y contestamos lo más rápido posible a las preguntas”, señala Gil.

Asegura que se practica una escucha activa, ya que incluso se llegan a incorporar al programa propuestas ciudadanas. “Estamos trabajando en plataformas en las que la gente vota nuestras propuestas. Contestamos a las más votadas y las incorporamos al programa si se estima oportuno. Y si no las incluimos, explicamos por qué”, especifica.

Aunque se da libertad a las organizaciones locales y regionales y los miembros del partido, sí que se tutela su acción en redes sociales. “Damos formación en temas técnicos, herramientas de monitorización, cursos de buenas prácticas, etc. Y tenemos cierto análisis y control de lo que se está haciendo. En primer lugar, para aprovechar las cosas útiles y novedosas y las buenas ideas. Y por otro lado, para ver si hay quien difiera de las líneas que marca el partido”.

El secretario general, Pedro Sánchez, es bastante activo. Cuenta con 161.000 followers en Twitter y 79.000 fans en Facebook. Alfredo Pérez Rubalcaba y Patxi López disponen de una buena cantidad de seguidores (246.000 y 184.000, respectivamente) en la red de microblogging. Y a Eduardo Madina también le gusta mucho Twitter (119.000 seguidores). Mención especial merece el alcalde de Jun, José Antonio Rodríguez Salas, con 340.000 followers.

Podemos

Quizá sea la formación política con mayor espíritu 2.0. No en vano, la red tuvo una gran relevancia en su propio origen y concepción. Además internet es fundamental en la organización y las votaciones de los ‘círculos’ en los que se subdivide.

Esto se traduce en una abundante presencia en la red. “Tenemos numerosos espacios donde interactuamos con toda persona que quiera acercarse a Podemos, desde ‘Plaza Podemos’ a nuestras redes sociales. Tenemos presencia en Instagram, Google+, Youtube (más de 6 millones de visionados)… Y especialmente en Facebook (cerca de 973.000 fans en la cuenta central) y Twitter (624.000 followers), además de todas las cuentas de carácter local o sectorial”, especifica Nagua Alba, del Área de Redes del Consejo Ciudadano del partido. Además, edita diariamente un periódico digital que recoge noticias del partido.

“Nuestra presencia en redes dista mucho del uso que los partidos tradicionales hacen de las mismas. Es un uso mucho más natural. No utilizamos las redes como un ‘megáfono’ a través del cual sólo se da difusión a nuestra actividad o propuestas. También damos una importancia especial a la interacción con nuestros seguidores. Les preguntamos, les respondemos, escuchamos sus propuestas, etc. Las redes sociales son para Podemos una herramienta fundamental que se engrana en la lógica de la formación: hacer partícipe a la gente de las decisiones”, explica Alba.

Además, cada ‘círculo’ local o sectorial tiene un alto grado de autonomía, lo que puede generar conflictos si no existe una estrategia conjunta. “Cada cuenta local o sectorial tiene autonomía para publicar lo que considere de interés para sus seguidores, siempre y cuando esté dentro de la línea política y ética de Podemos. Las campañas de carácter más general se elaboran de manera colaborativa entre todos los community managers y se les da difusión desde todas las cuentas”, indica la representante del partido.

Varios miembros del partido se mueven como pez en el agua en los social media, como Pablo Iglesias, Iñigo Errejón, Pablo Echenique o Teresa Rodríguez. Por ejemplo, Iglesias tiene 983.000 followers en Twitter y casi 339.000 ‘likes’ en Facebook.

Ciudadanos

El partido liderado por Albert Rivera también se aproxima al concepto 2.0, con abundante actividad en Twitter (174.000 followers) y gran presencia en Facebook (casi 189.000 ‘me gusta’). Utiliza estas plataformas para informar de sus propuestas, comunicar agenda, difundir declaraciones, etc., pero también plantea preguntas a los usuarios y responde a las preguntas que formulan los internautas. Además, su canal de YouTube tiene más de 7 millones de visualizaciones. Por otro lado, cuenta con iniciativas como los encuentros twitteros que celebra para sus simpatizantes en diferentes ciudades

Rivera es la cara visible del partido y también se desenvuelve bien en las redes sociales. Tiene 291.000 seguidores y gran actividad en Twitter y casi 169.000 ‘likes’ en su página de Facebook.

C’s no ha contestado a las preguntas planteadas por esta redacción respecto a sus objetivos, la forma de entender las redes sociales o la existencia de unas líneas de actuación marcadas desde la organización central.

UPyD

Unión, Progreso y Democracia es una organización con gran presencia online. Julio Lleonart i Crespo, Social Media Strategist, explica que el partido se relaciona con los electores a través de “redes sociales, blogs, web, e-mail, WhatsApp… Tiene diversos perfiles en redes sociales, tanto oficiales -nacionales, europeos, autonómicos, locales- como de candidatos, portavoces y miles de activistas voluntarios en cada red. Podríamos decir que en cada red tenemos cientos de miles de seguidores por vía directa o indirecta”. La cuenta principal tiene casi 30.000 fans en Facebook y 131.000 seguidores en Twitter. Y Rosa Díez, la cara más reconocida del partido, dispone de 83.600 fans en Facebook y 17.300 followers en Twitter.

El partido también tiene cuenta en Google+ y canal en YouTube. De hecho, es el partido con mayor número de reproducciones, cercanas a los 9 millones. Tiene bastante que ver su exdiputado Toni Cantó, protagonista de muchos de los vídeos más vistos, especialmente el famoso ‘Espanya ens roba’, parodia de ‘La vida de Brian’.

La formación magenta intenta que su presencia en redes sociales se traduzca en interacción. “Respondemos preguntas, fomentamos la conversación, el aporte de ideas, la bidireccionalidad. Nos encanta escuchar y coger todo lo que nos aportan e incorporarlo. Obviamente, también comunicamos actos, compartimos vídeos, imágenes, memes, etc.”, precisa Lleonart.

La organización es consciente de la necesidad de coordinar su actividad en este canal. “No se puede actuar en redes sociales bajo el paraguas de una marca y que no haya una estrategia, unas líneas de acción y, sobre todo, un manual para posibles crisis que conozca todo el mundo y aplique cuando corresponda”, asegura el Social Media Strategist de UPyD. Estas líneas de actuación se resumen en “hablar de lo que se sabe, ser respetuoso, nunca mentir, ser proselitista pero sin atacar a otros partidos o miembros de los mismos, etc. En definitiva, acercar nuestra política y nuestras acciones a los ciudadanos”, puntualiza Lleonart.

Izquierda Unida

Cuenta con perfiles en Facebook (cerca de 151.000 ‘likes’), Twitter (183.000 seguidores), canal en Youtube (3,5 millones de reproducciones) y un canal RSS. La formación utiliza estas plataformas para informar de su participación en eventos, comunicar sus iniciativas legislativas y enmiendas, publicar noticias, recoger declaraciones o entrevista a sus líderes, etc. Sin embargo, aprovecha poco las posibilidades de interrelación con los usuarios.

El político más seguido de esta formación es Alberto Garzón, miembro activo del movimiento surgido en torno al 15-M y con un marcado perfil 2.0. Tiene 347.000 seguidores en Twitter y más de 210.000 ‘me gusta’ en Facebook.