El sensor TouchID revolucionó la seguridad y la comodidad en el manejo de los dispositivos móviles cuando Apple lo presentó en su iPhone 5S pero parece que ese no es el futuro a largo plazo que están ideando en Cupertino.
De hecho el futuro, tan inmediato que si no llega este mismo año con toda probabilidad podría hacerlo el año que viene, pasa por prescindir del botón frontal de los iPhone/iPad y en su lugar habilitar un espacio en la propia pantalla táctil capaz de reconocer la huella dactilar del usuario.
A tal fin Apple se ha hecho con 26 de las 31 patentes que la empresa Privaris había registrado en relación con las huella dactilares y las pantallas táctiles. Esto permitiría ubicar el sensor debajo de la propia pantalla de manera que se podría conseguir una pantalla de mayor tamaño al poder crecer hacia el espacio que actualmente ocupa dicho botón, o conseguir un dispositivo de tamaño algo más reducido si merma alguna en el tamaño de la pantalla. Sería el paso para un iPhone con una pantalla de borde a borde.
Privaris, nacida en 2001 y dedicada a los sistemas de seguridad biométrica, habría cesado su actividad hace cinco años por lo que lo que Apple habría adquirido ahora sería tan solo la propiedad intelectual de sus patentes
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