España le sonríe a la industria de los videojuegos. El año pasado, su facturación se elevó hasta los 1.163 millones de euros, según datos de la Asociación Española de Videojuegos (AEVI).
Estos 1.163 millones significan un crecimiento del 7,4 % respecto a 2015.
Cabe señalar que el liderato en unidades corresponde a los videojuegos físicos, que aportaron 8 millones de unidades el año pasado. Les siguen los videojuegos online con 7,4 millones. En ambos casos ha habido una mejoría.
Las aplicaciones para móviles contribuyeron con 6,8 millones, las aplicaciones vinculadas a tabletas supusieron 3,8 millones y los videojuegos para videoconsolas portátiles se quedaron cerca, con 3,7 millones.
“El videojuego crece en España un año más”, valora José María Moreno, director general de AEVI, que dice que 2016 “ha sido un buen año para la industria en España”.
No en vano, “el consumo ha crecido, las instituciones entienden cada vez más la necesidad de desarrollar la industria local y facilitar las inversiones internacionales y se ha celebrado el mayor evento de la historia de los videojuegos en España”, dice, en referencia a la primera edición del Barcelona Games World. “El listón para el 2017 está muy alto”, considera Moreno.
El directivo de AEVI también ha destacado que “seguimos situándonos entre los primeros países europeos en consumo. Nuestro principal reto para el 2017 es mantener nuestro liderazgo y situarnos también entre las primeras industrias de desarrollo”, apunta. Y recuerda: “el aumento en las ventas de videojuegos consolidan nuestra industria como la preferida en el ámbito del entretenimiento por los españoles”.
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