Hasta ocho dispositivos distintos de la marca Galaxy, además del teléfono Nexus S, estarían afectados por un problema de seguridad que podría desencadenar en actividades de espionaje por parte de terceros.
Con la técnica adecuada y la maldad oportuna, esto serviría para activar el acceso remoto a aquella información que el usuario legítimo va acumulando en su equipo. Se habla en concreto de la lectura, la modificación y la eliminación potencial de datos ajenos.
¿Los modelos afectados? Galaxy S, S2 y S3, Galaxy Note y Note 2, Galaxy Nexus y Galaxy Tab 2 7.0 y Tab 2 10.1.
Como no podría ser de otra manera dada su colaboración con la FSF, los autores del descubrimiento cargan las tintas sobre el uso de software propietario en los protocolos de comunicación.
Y es que, según comentan, “se sabe que estos sistemas tienen puertas traseras que permiten al módem ejecutar operaciones E/S de forma remota en el sistema de archivos”.
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