Nuevas formulas de interacción entre la web social y los medios de comunicación en 2010

El 2009 ha sido el año que ha transformado por completo la Web, convirtiéndola plenamente en una herramienta social. Un gran año para la web durante el cual Facebook y Twitter han pasado a ser la principal fuerza. Si le queda alguna duda dudas, basta con mirar las estadísticas.
Facebook tiene ahora 350 millones de usuarios registrados -tantos como el número de visitantes mensuales de Google o Yahoo- y todo indica que las redes sociales están alcanzando una aglomeración crítica y a punto de transformar por completo el uso de Internet.
Sobre estas fechas el año pasado, usábamos nuestros browsers para leer noticias o reservar viajes para las vacaciones. La web era el reino de  los medios de comunicación que publicaban contenidos para uso masivo y de las empresas que vendían productos y servicios online a multitudes de consumidores. Todos éramos objetivo del marketing y el consumo masivos.
Todavía seguimos haciendo esto, pero la gran diferencia es que cuando me vaya de vacaciones este año  actualizaré mi perfil en Facebook, comentaré en Twitter las cosas que veo, y subiré fotos y vídeos a la red. Millones de personas conectados en una red compartimos y participamos en un tipo de publicación muchos-a-muchos. El monopolio de los medios de comunicación como el New York Times y el Wall Street Journal se ha roto por fin: están en peligro –llega el reportero o el editor de sus propias noticias.
Todos conectados somos el poder que no puede ser ignorado. Un poder mayor que Google. Algunos de los mejores reportajes y noticias de última hora se pueden encontrar en la red social. Si examináramos los eventos más memorables del 2009 comprobaríamos que en todos ellos Facebook y Twitter jugaron un papel fundamental, conectando a la gente e informando de las últimas noticias. Seguro que recordarán la participación masiva y las denuncias durante las elecciones de Irán o la saturación de Twitter tras el fallecimiento de Michael Jackson.


Se trata de una batalla dura que está cambiando el modelo de negocio de los medios convencionales y más que luchar contra las redes sociales, el futuro nos demostrará que la única salida para ellos sería  abrazarlos e incorporarlos en su modelo de funcionar. Los medios deberían apostar por distribuir cada vez más sus contenidos a la web social –algunos ya lo hacen- y aquí es donde están ganando importancia los nuevos protocolos y estándares de Internet, y la denominada portabilidad de datos  web.
Las webs modernas y las redes sociales son autenticas plataformas de  servicios y contenidos. Nosotros accedemos a través de un navegador pero los sitios web también son capaces de acceder a ellos y comunicarse entre sí. Por ejemplo, si un periódico quiere que los lectores publiquen comentarios online y que visiten su página digital a través de sus cuentas en Facebook, el medio tendrá que usar un protocolo llamado Facebook Connect. Existen protocolos parecidos para Twitter, Google y muchas otras webs populares y redes sociales.     
Compartir identidades es tan sólo un ejemplo del conjunto de nuevos estándares y protocolos que se espera estarán completos en 2010 – tecnologías que permitirán describir e identificar personas, grupos y organizaciones, y facilitarán la creación extensiva de contenido por parte de los usuarios de forma segura.
Algunos de los nuevos protocolos representarán nuestras actividades: lo que subimos y lo que escribimos en la web; mientras otros convertirán nuestros contactos en datos transportables y reflejarán las relaciones humanas a través de enlaces. Los estándares más avanzados permitirán conectar semánticamente el contenido de diferentes redes sociales en las cuales participamos. 
A medida que estos estándares se vayan incorporando en las webs de los medios, nuestra experiencia online cambiará radicalmente. Es obvio que los profesionales de los medios jamás van a poder ser sustituidos, pero el periodismo participativo ha demostrado tener un hueco en el programa de la agenda global y los medios necesitarán mirar con ojos frescos todas estas tendencias para beneficiarse de la nueva realidad online.
Los nuevos protocolos facilitarán la creación de canales de redes sociales que promocionarán el contenido de los medios y exigirán nuestra opinión y comentarios. Seremos capaces de unirnos en debates en las páginas de los periódicos más importantes a través de nuestras cuentas de Facebook y Twitter. Haciendo esto, incluiremos a nuestros amigos y familiares en las conversaciones y los expondremos a los contenidos que encontramos online.
Podremos hablar con nuestra familia y amigos más a menudo y ganar tiempo leyendo las recomendaciones de nuestros amigos. Los periódicos online están empezando a recibir más tráfico por medio de Twitter que de Google y los medios de comunicación deben pensar en un modelo económico para monetizar la participación ciudadana y podrán fácilmente resolver el problema del descenso del número de lectores: de hecho, los escépticos no tienen por qué tener miedo porque se trata de un modelo donde todo el mundo gana. La vida es mejor cuando se comparte.