El caso de la adquisición de DTS por parte de Telefónica y su obligación a remitir información periódica a la CNMC sobre sus ofertas, además de poner a disposición de otras compañías canales premium a precios competitivos, ha terminado en sanción.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha decidido sancionar a la compañía con 5 millones de euros por una infracción muy grave del artículo 62.4.c de la LDC.
“Ya desde la primera remesa de información a la que estaba obligada (un mes después de la operación de concentración) y de manera continua hasta el año 2020, ha incumplido la obligación”, dice el comunicado oficial, “al aportar de manera incompleta, no puntual y en formato que impedía el ejercicio de verificación de la CNMC, la información exigida en los compromisos”.
Este comportamiento se extendió desde mayo de 2025 hasta junio de 2020 y ha supuesto un complicación para la labor de vigilancia de las autoridades competentes respecto a los compromisos de replicabilidad de las ofertas de terceros.
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