La nueva baja de Steve Jobs reabre el polémico tema de la sucesión en Apple

Esta situación de secretismo ya preocupa desde hace tiempo a buena parte del accionariado, y en la próxima junta anual que se celebrará el 23 de febrero someterán a votación un documento en el que se pide mayor transparencia respecto a los planes de sucesión en Apple.

La compañía recomendó a los accionistas que votaran en contra de esta petición porque consideran que hacer públicos los planes sucesorios podría conllevar la marcha de altos directivos a empresas de la competencia (nos preguntamos cuáles serán esos planes para que Apple tema una “fuga de cerebros” si se dan a conocer).

Esta información se supo el pasado 10 de enero, cuando aún no se sabía públicamente que Jobs se ve obligado a coger una nueva baja médica, aunque no sería de extrañar que los accionistas conocieran esta información y precisamente por ello presionaran para saber los planes de sucesión.

Sobre el motivo concreto de la nueva baja del gurú de Apple no ha trascendido ningún dato, aunque varios medios apuntan a que podría tratarse de una recaída en el cáncer de páncreas que sufrió en el 2004 o de complicaciones con el hígado que tiene trasplantado desde el año pasado.

Sea como fuere, los accionistas están más preocupados de lo normal y el mercado también, no en vano las acciones de Apple han caído un 6,4% en su primer día de cotización en Wall Street tras darse a conocer la noticia.

Por el momento le corresponde a Tim Cook, director de operaciones de la compañía, llevar el timón de Apple mientras dura la convalecencia de Jobs como ya ocurrió el año pasado cuando el CEO cogió su anterior baja.

En este sentido, algunos medios ya posicionan a Cook como firme candidato a la sucesión si es que ésta tiene que producirse, también se habla del actual vicepresidente de marketing de producto, Phil Schiller, del vicepresidente de diseño industrial Jonny Ive o del responsable de iOS, Scott Forstall entre otros.

vINQulos

The Register, GigaOM