El plan de Sarkozy para reactivar la economía hace palidecer al Plan Avanza2

Francia ha identificado los principales problemas a los que se enfrenta su economía para poder salir de la crisis: no son fuertes en innovación y deben despegar en materia de investigación. Unas observaciones, por otra parte, que son más que conocidas a los españoles: el Gobierno siempre apunta a estos mismos problemas y necesidades a la hora de escapar a la recesión.

Ahora bien, la respuesta de unos y otros aunque similiar no es igual. Las cantidades que el Gobierno galo invertirá para conseguir salir del atolladero económico vía la nueva economía hacen palidecer al Plan Avanza2, la última apuesta financiera del español para dinamizar el sector de las nuevas tecnologías.

Sarkozy acaba de presentar su plan de inversión nacional para reactivar la economía francesa, un plan en el que las nuevas tecnologías tienen un importante papel.

Frente a los 1.500 millones de euros presupuestados por Industria para 2009, cantidad que la patronal siempre ha lamentado insuficiente, Francia hará un despliegue que triplica la inversión española.

El país vecino destinará a la economía digital 4.500 millones de euros, mediante un fondo nacional para la sociedad digital dentro del conjunto de prioridades nacionales que acaba de presentar la Administración Sarkozy. Dos serán las líneas de inversión fundamentales. En primer lugar, Francia intentará acelerar el paso a la banda ancha, para alcanzar velocidades de navegación de 100 Mbits/s con unas mínimas previstas de 50.Para este fin se destinarán 2.000 millones.

A los 2.000 tendrán que sumárseles los 750 millones de euros que las operadoras ya han destinado a este tema.

En segundo lugar, la Administración destinará 2.500 millones de euros a desarrollar servicios, usos  y contenidos digitales “innovadores”. Entre los aspectos en los que Francia se centrará está el desarrollo del cloud computing, para crear una alternativa europea a los gigantes estadounidenses de este segmento emergente. Igualmente, se apostará por el trabajo en tecnologías de base para varios sectores y digitalización de contenidos culturales.

Éste es el grueso de capital destinado por la Administración Sarkozy a las nuevas tecnologías, aunque el destinado a otros sectores y segmentos también puede tocarle. Francia invertirá 2.500 millones en biotecnología, 5.500 millones en dinamizar el sistema de patentes, 8.000 en investigación y 11.000 en sus universidades.