AOL, Microsoft y Yahoo acusan de spam a cientos de empresas

Estas compañías son las primeras en acogerse a la ley conocida como
Can-spam Act para actuar contra las organizaciones de correos masivos
a gran escala.

Microsoft, Yahoo, AOL y Earthlink, los cuatro proveedores de Internet

más importantes de Estados Unidos, han denunciado a cientos de

remitentes de correos electrónicos acusados de enviar mensajes masivos

no solicitados, según informa la agencia Bloomberg.

Estas

compañías están estrenando una nueva ley estadounidense, aprobada el

pasado 1 de enero, para tratar de frenar el fenómeno del correo basura,

más conocido como spam, añaden las fuentes.

Las

compañías han hecho públicas estas denuncias en una rueda de prensa y

son las primeras en acogerse a la ley conocida como Can-spam Act. Las

denuncias se han dirigido contra las empresas de correos masivos que

actúan a mayor escala en EE UU y les acusan de enviar cientos de

millones de e-mails no solicitados.

Así, los mensajes no

deseados que anuncian pastillas contra la impotencia, para adelgazar,

préstamos baratos o pornografía se han convertido en un auténtico dolor

de cabeza para los servicios gratuitos de correo electrónico y sus

usuarios.

En este sentido, según Gartner, los proveedores

de Internet estadounidenses gastaron 635 millones de euros el año pasado

en tratar de bloquear el correo basura y proteger sus redes de virus.

Estamos tratando de vencer a los peores, a los más grandes y conocidos. Las

demandas son el fruto de nuestros esfuerzos por identificar a los

spammers y ponerles entre las cuerdas. El siguiente paso será sacarlos

del negocio, asegura Randall Boe, vicepresidente ejecutivo de AOL.

Entre las acusaciones está la de enviar publicidad engañosa y la de falsificar

sus direcciones remitentes, enviando mensajes a través de ordenadores de

terceras partes para ocultar su origen e impedir que el receptor pueda

darse de baja. Todas estas cuestiones están consideradas como delitos en

la nueva ley. De hecho, los proveedores pueden pedir daños de entre 25 y

100 dólares por cada pieza de spam recibida, según contempla la

normativa.