Así se debe implementar la IA para recursos humanos, paso a paso

La consultora española atSistemas explica que el objetivo deber ser “complementar la aportación humana, no competir con ella”.

La capacidad analítica y de personalización, así como la automatización, aparejadas a la tecnología de inteligencia artificial (IA) potencian su valor en las empresas.

Uno de los departamentos que se pueden ver beneficiados por su implementación es el de recursos humanos, “anticipando problemáticas, mejorando la experiencia de empleado y optimizando tareas”. Así lo señala Antonio Chamorro, director de estrategia de la consultora española atSistemas determina que “los beneficios de esta tecnología en este ámbito son claros, pero debemos tener en cuenta algunas buenas prácticas a la hora de la implantación de dicha tecnología para que los recursos humanos y los digitales puedan convivir”.

“El objetivo”, explica, “es complementar la aportación humana, no competir con ella. La fórmula a seguir es la de combinar el talento con las enormes capacidades que nos proporciona la inteligencia artificial”.

Así, atSistemas propone, en primer lugar “evaluar los datos desde una perspectiva humana”. Es decir, no sacar conclusiones sin tener en cuenta el conocimiento y la sensibilidad de los profesionales que ya trabajan para las empresas, que permitirán contextualizar para poner los datos en perspectiva.

Otro punto importante es “comprender qué está siendo aprendido por la IA y cómo será utilizado”. Como los sistemas aprenden de acciones anteriores, hay que evitar errores. Si en alguna ocasión la IA usa sesgos para el cribado de currículos, puede considerar que eso es lo que tiene que hacer y seguirá discriminando en su toma de decisiones.

En tercer lugar, hay que “integrar adecuadamente la IA en los métodos y procesos de trabajo” de forma que permita a los empleados olvidar competencias técnicas, repetitivas o duras para centrarse en otras más creativas.

“Comenzar con un enfoque sencillo y diseñar un ROI a corto plazo” también es clave. “Las iniciativas de IA pueden ser complejas de implementar. Cuanto más se aumente la ambición, menos viable será técnicamente”, advierte atSistemas, “o requerirá un excesivo nivel de inversión. Un alcance más focalizado y realista en un plazo asequible aportará credibilidad, aprendizaje y siempre es posible incrementar opciones posteriormente”, termina.

Por último, los expertos recomiendan “considerar las limitaciones en contextos legislados, regulados o incluso la ética del uso y cómo se aplicará”. Esto es importante en la selección de talento, donde una decisión no puede venir condicionada únicamente por el histórico, sino también por el futuro y la posibilidad de mejora.