Conectando nubes híbridas con Cisco Intercloud

Cisco Live! 2015. El fabricante está confeccionando un ecosistema de desarrolladores, proveedores y servicios capaz de responder a las necesidades reales de las organizaciones a la hora de desplegar soluciones cloud.

*** Especial desde San Diego

Cisco acaba de anunciar importantes novedades relacionadas con la iniciativa Intercloud, con la que pretende conectar nubes híbridas para que formen parte de un gran entramado disponible y accesible desde cualquier lugar, de forma sencilla y eficiente.

Durante esta edición del Cisco Live! y a nivel mediático, la iniciativa Intercloud se ha visto superada sin lugar a dudas por el concepto de Internet of Everything. Sin embargo, para el fabricante supone una pieza clave dentro de la tecnología que permitirá desarrollar la conexión de todas las cosas, la recopilación de datos, su procesamiento y, finalmente, el cambio a mejor en el comportamiento de las personas y empresas en función de los resultados obtenidos.

Intercloud va más allá del despliegue de nubes híbridas que permitan todas esas conexiones y tratamiento de la información. Busca conseguir un entorno de TI híbrido en el que todas las nubes están interconectadas entre sí, se hablen entre ellas, se entiendan. Y lo más importante de todo reduciendo la complejidad durante su orquestación y administración. Hasta hace poco hablar de este hecho hubiera sido impensable, pero es el objetivo de Cisco y, por lo que hemos podido comprobar durante estos días, se trata de algo factible: Una compañía podrá mover sus activos (software, datos) de una nube a otra de un centro de datos a otro en cuestión de clics en función de sus necesidades.

intercloud

En primer lugar, el fabricante ha anunciado nuevos acuerdos con 35 desarrolladores independientes de software (ISV) para que puedan construir nuevas soluciones cloud basadas en la plataforma Intercloud. No es más que el comienzo, ya que también se ha puesto en marcha la tienda de aplicaciones en la que albergar todos estos aplicativos: Cisco Intercloud Marketplace, que estará disponible públicamente durante el próximo invierno. A través de este canal se pondrán a disposición de las empresas las soluciones en la nube con las que dar respuesta a despliegues para el Internet of Everything, entre otros. En la actualidad, Cisco ya cuenta con más de 100 clientes y 30 partners especializados en infraestructura de centros de datos para dar cobertura a dichas implementaciones.

Cisco Intercloud: Marketplace y Fabric de la mano

Como parte de la tienda de aplicaciones, Cisco se ha asegurado de poner a disposición de los desarrolladores todos los recursos necesarios para la puesta a punto del software. Desde APIs a SDKs, pasando por la documentación necesaria a la hora de construir nuevas piezas, probarlas y ponerlas en producción para que todo funcione desde el primer momento. DevNet, la comunidad de desarrolladores de Cisco, jugará aquí un papel de vital importancia.

En el área de Big Data y analítica, Cisco ha sellado diversos acuerdos para que los clientes también puedan gestionar esa explosión de datos que estamos viviendo y que se antoja exponencial durante los próximos años. Así, se asegurara compatibilidad con las soluciones de los principales proveedores como MapR, HortonWorks, Cloudera y Hadoop. La capacidad de gestionar esos grandes volúmenes de información, estructurada o no, está íntimamente ligada –de nuevo- con el Internet de Todas las Cosas. Y es que es necesario poder gestionar miles de sensores distribuidos geográficamente para obtener los datos que generan y procesar la información. Es exactamente lo que Cisco quiere conseguir con Intercloud.

Pero el proveedor global de servicios y soluciones tampoco olvida la faceta que más alegrías le ha dado en el pasado, la que le ha permitido conformarse como uno de los gigantes TIC: la infraestructura. Obviamente, pretende que esas nubes híbridas interconectadas corran en su hardware y para ello ha anunciado novedades y mejoras a distintos niveles, como la seguridad (a nivel de cortafuegos), el control (de las máquinas virtuales independientemente de su modalidad pública o privada) y la flexibilidad (compatibilidad con más hipervisores: Microsoft Hyper-V y OpenStack KVM).

En definitiva, se trata de simplificar la gestión de nubes híbridas e interconectarlas entre sí a pesar de la naturaleza heterogénea que las rodea.