Los ‘crypto-bros’ dominan las startups de Web3: solo el 13% de sus equipos fundadores incluye mujeres

Además, según un reciente estudio, únicamente el 3% de las empresas emergentes de este ramo tiene co-founders exclusivamente femeninos.

Aun queda mucho por hacer, pero poco a poco la presencia de emprendedoras en las startups tecnológicas se va haciendo cada vez más común. No obstante, su representación en el ecosistema todavía es muy baja en comparación con la de los hombres.

La brecha de género se acusa aun más en ciertos sectores, como el del Web3. Así lo pone de manifiesto un reciente estudio publicado por Boston Consulting Group (BCG), para el cual tuvieron en cuenta una base de datos de casi 2.800 participantes procedente de Crunchbase.

El estudio revela que en las startups de Web3 analizadas solo un 13% de los equipos de co-founders incluyen alguna mujer. En este ramo solo un 3% de las empresas emergentes tiene un grupo de co-fundadores constituido únicamente por mujeres.

Estos datos resultan algo preocupantes, pero aun lo son más los referentes a la recaudación de capital. Los equipos formados solo por fundadores recaudan cuatro veces más de fondos que aquellos conformados por fundadoras.

Además, se da el caso de que ninguna startup de esta industria que haya sido fundada por emprendedoras ha logrado recaudar más de 100 millones de dólares de financiación.

De nuevo, este segmento reproduce ‘los pecados’ del ecosistema emprendedor en general. Las firmas de capital riesgo también tienen una representación femenina muy escasa.

“Los equipos exclusivamente masculinos tienen el mayor éxito en la obtención de fondos, los equipos mixtos con hombres y mujeres están en el medio, y los equipos exclusivamente femeninos son los que peores resultados obtienen a la hora de captar fondos”, encontró el estudio.

“Dados estos resultados, es comprensible por qué muchas mujeres están cansadas de unirse o invertir en nuevas empresas tecnológicas”, añade.

No hay mujeres en el área técnica

El estudio también pone de manifiesto que las mujeres que trabajan en startups de Web3 tampoco están involucradas en aspectos técnicos o de desarrollo, sino que sus roles se circunscriben a los recursos humanos y al marketing.

Además, sus startups no se orientan tanto a áreas como las finanzas o el blockchain, sino que están más enfocadas a segmentos creativos y sociales de la Web3.

Pese a estas conclusiones, el estudio deja la puerta abierta a la esperanza: asegura que este sector es incipiente y aun hay tiempo para resolver los problemas de disparidad de género.