“Es probable que el uso de e-wallets supere al de tarjetas de crédito en España en los próximos años”

A un 70 % de los consumidores no les importa que su banco principal use sus datos personales si eso conlleva una personalización de la experiencia.

Y es que la propuesta customizada es, junto con una digitalización correcta y la responsabilidad ambiental, uno de los factores que determinan el grado de fidelización de los clientes en el sector fiinanciero.

Así queda recogido en el informe Customer Behavior and Loyalty in Banking 2023 de Bain and Company, que descubre una tendencia hacia la fragmentación y la desagregación de los servicios debido a la popularización de los neobancos.

“Los consumidores son cada vez más propensos a elegir proveedores nativos digitales“, confirma Gerard du Toit, socio de Bain & Company. “Sin embargo, en todos los países que hemos encuestado, los bancos tradicionales siguen teniendo una proporción mayor de las transacciones básicas con los consumidores”.

“En España”, por ejemplo, “sólo la mitad de los clientes consiguen abrir una cuenta bancaria 100 % online sin problemas al primer intento”, según confirma Santiago Casanova, socio de Bain & Company en Madrid. Y es que, “pese al enorme avance, las entidades aún tienen recorrido de mejora en el proceso de onboarding digital”.

Lo que ya está claro es que, “como ya sucedió en Alemania o Italia, es probable que el uso de e-wallets supere al de tarjetas de crédito en España en los próximos años“, apunta Casanova.

Las carteras electrónicas han comenzado a despuntar como método de pago preferido para el comercio electrónico y las transacciones online en ciertos países. En China y la India los e-wallets son el principal método de pago.

Mientras, en Estados Unidos y otros mercados desarrollados como la Unión Europea, los bancos están viendo cómo los usuarios más jóvenes prefieren este tipo de carteras antes que las tarjetas de crédito.