Evitar la “gravedad de datos”, nueva norma para 2024

Denodo comparte su visión sobre el futuro de la gestión de datos con la llegada de un nuevo año.

Los datos impulsan el negocio de las empresas en el entorno digital. Se han convertido en uno de sus activos principales y seguirán teniendo relevancia durante 2024, un año en el que la gestión de los datos estará marcada por cuestiones como la expansión de la inteligencia artificial (IA).

Denodo, compañía especializada precisamente en gestión de datos, visualiza cinco grandes tendencias de cara a los próximos doce meses.

En primer lugar, cree que la nueva norma será evitar la “gravedad de datos”. Esto ocurrirá en un contexto en el que resulta cada vez más complicado confiar en un único proveedor de nube o data lake para cubrir todas las necesidades de extremo a extremo. Lo ideal sería poner el ojo en tecnologías para una gestión distribuida.

Otros factores implicados son el encarecimiento de la replicación, la soberanía, las normativas sobre gobernanza y la necesidad de obtener información rápido.

El año que viene las empresas experimentarán un auge del data mesh. “Las plataformas de datos cobrarán cada vez más importancia”, prevé Denodo, para mejorar la experiencia de uso final.

“A diferencia de los paradigmas tradicionales centralizados, en los que los datos son almacenados y gestionados por un equipo central, el data mesh se organiza en torno a múltiples dominios, cada uno de los cuales es gestionado por los principales consumidores”, indica esta compañía.

“El punto de inflexión será la comprensión de que los productos de datos deben tratarse con el mismo nivel de importancia que cualquier otra oferta de productos”, añade.

Las nuevas plataformas de datos entregarán recomendaciones personalizadas y posibilitarán consultas en tiempo real desde el propio catálogo de datos, con una retroalimentación interactiva.

A la hora de trabajar con datos, los negocios lucharán por que las entregas se realicen a tiempo, pero también por favorecer un acceso rápido a los datos.

Con la IA ganando presencia en el mercado, las empresas y sus directivos tendrán que modificar ciertos procedimientos. Denodo augura una “mayor dificultad para adoptar IA generativa en las organizaciones” a lo largo de 2024.

Garantizar la calidad y la gobernanza de datos será uno de los desafíos más destacados. A esto hay que sumarle el reto ético y la gestión de costes.

“Cada uno de estos obstáculos está relacionado directa o indirectamente con la estrategia general de gestión de datos de una organización, lo que afecta a su capacidad para garantizar la integridad de los mismos en los modelos de IA, cumplir con las normativas o facilitar la integración de estos modelos en los sistemas empresariales”, especifican los autores de estas predicciones.

La cuarta tendencia clave en datos será la consecución de una “gestión más eficaz de los costes de la nube gracias a las FinOps”, sin sacrificar el rendimiento competitivo.

La idea es que las organizaciones realicen exámenes detallados de los patrones de uso de datos, descubran áreas poco eficaces y adopten soluciones de almacenamiento más rentables. FinOps acercará un modelo de gasto flexible.

Por último, existe la “necesidad de simplificar la seguridad y la gobernanza de los datos”, por lo que los próximos meses estarán marcados por un incremento de las soluciones que permiten hacer precisamente esto. A ello contribuirán las políticas globales que tienen en cuenta funciones de los usuarios y también su ubicación.