Humanism, un vehículo de financiación que busca invertir en emprendedores, no en startups

Los hermanos Liberman esperan poner en marcha su iniciativa el próximo año, apoyando económicamente a 20 o 30 fundadores.

Muchos inversores de firmas de capital riesgo y business angels repiten una y otra vez -como una especie de mantra- que ellos no invierten tanto en las startups, sino en los equipos que hay detrás.

Por eso tiene sentido que a alguien se le haya ocurrido montar un vehículo de inversión que apoye económicamente a los hombres y mujeres responsables de estos éxitos y no a sus compañías.

Hablamos de Humanism, un fondo que están preparando los hermanos Daniil y David Liberman. Si no te suenan sus nombres debes saber que hasta la fecha han montado cuatro startups e incluso han sido directores de Producto de Snapchat.

En un principio los creadores de la iniciativa cuentan con unos fondos de 15 millones de dólares que esperan que se incrementen a 50 millones de dólares a finales de año.

El piloto espera lanzarse el próximo año. Para esta primera promoción esperan escoger a entre 20 y 30 emprendedores tecnológicos.

Su lógica viene sustentada por las estadísticas de Y Combinator. Según estas, solo el 5% de las empresas emergentes llegan a ser unicornios, pero el 11% de los co-founders crean unicornios. Así que, ¿por qué no ir a lo mollar y apostar directamente por las personas, sin medias tintas?

Este piloto les permitirá probar algunas cosas que hasta la fecha no han podido testearse ante la falta de un modelo similar. Por ejemplo, ver cómo proteger a las personas de la presión de los inversores. Su plan es promocionarlos usando los medios.

Para que no se produzca burn-out tienen pensado limitar los días de negociación de acciones, con el fin de que la gente no esté pensando en su valoración las 24 horas del día.

Buscando que no haya desigualdades también han propuesto que en cierta medida los perfiles sean ciegos y los inversores no puedan ver de antemano su género o raza, según se hace eco Fast Company.

Más allá de los co-founders

Por ahora la iniciativa se centrará en emprendedores tecnológicos, pero los Liberman sueñan con extenderla a otros perfiles y profesionales, como médicos, artistas, etc. Sería algo así como un mecenazgo de talentos.

Los hermanos proponen crear modelos estadísticos para predecir las valoraciones de cada industria, incluyendo a aquellas personas que cambian de sector.

Además, poco a poco esperan que cada vez talentos más jóvenes puedan unirse a su iniciativa. Su idea es financiar a estudiantes de secundaria, ayudándolos para pagar la universidad y fundar sus primeras startups.