La única forma de que un Segway sea chulo: sacrificando una Vespa

La solución de movilidad urbana que presenta el Segway tiene sus ventajas y sus inconvenientes, pero entre estos últimos uno de ellos puede muy bien ser la estética. Si ese es uno de tus obstáculos a la hora de decidirte por uno de esos vehículos que no hacen ruído, consumen energía eléctrica y se mantienen en equilibrio prodigiosamente gracias a su sistema de giróscopos estás de enhorabuena gracias a este fabricante español que ha echado el ojo al clásico diseño de las Vespas y ha decidido trasladar la belleza de su escudo frontal, su faro y su manillar de mediados del S. XX a un vehículo de principios del S. XXI.

Las partes de Vespa proceden de Piaggio por lo que por ese extremo tenemos la fidelidad al original cubierta aunque con algunas adaptaciones como la transformación del sistema de iluminación del faro en el que para un menor consumo se ha recurrido al LED. Gracias al proceso artesanal de fabricación es totalmente personalizable en cuanto a colores, acabados o inclusión de vinilos para, por ejemplo, servir como soporte publicitario.

Gracias a sus dos motores (uno para cada rueda) de 1,43 CV de potencia puede alcanzar una velocidad máxima de 20 km/h con una autonomía de entre 30/35 kms dependiendo de velocidad y carga, pudiendo acarrear un máximo de 180 kilos y pudiendo salvar desniveles de hasta 30º.

La transformación estética no altera el funcionamiento del vehículo original manteniendo intacto el modo de manejo y las peculiares sensaciones que ofrece aunque ahora se añade ese elemento adicional de disfrute visual correspondiente a las suaves curvas de origen italilano. Este híbrido Segway Vespa cuesta 2.899 €, como hemos mencionado se fabrica bajo pedido y a mano en un proceso totalmente artesanal y tiene un plazo de entrega de 15 días. Llegamos a tiempo para pedírselo a los Reyes Magos.

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