Larry Page (Imagen por cortesía de Google - www.google.com)
La tecnología de coches autónomos puede ser la pieza que falta para una siguiente era en la que no se necesitarán carreteras.
Bloomberg ha revelado que el cofundador de Google, Larry Page, ha estado financiando un par de compañías de ‘coches voladores’ que supondrán otra disrupción tecnológica.
Zee.Aero lleva operando desde 2010 en silencio, desarrollando prototipos, y según Bloomberg cuenta con cerca de 150 empleados y una inversión por parte de Page de más de 100 millones de dólares. La compañía tiene una planta de fabricación en el centro de investigación de la NASA.
Por su parte, la otra statup, Kitty Hawk, comenzó su andadura el año pasado con Sebastian Thrun, antiguo respondable del equipo de coches autónomos de Google, a la cabeza y un equipo de una docena de ingenieros. La entidad tiene su centro de operaciones muy cerca de Zee.Aero.
Larry Page ha exigido que su apuesta por esta nueva tecnología y estas compañías permaneciera en secreto, quizás como un as en la manga para ganar terreno en el potencial mercado de los coches sin conductor.
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