Safe Creative lanza la declaración responsable de la creatividad frente al avance de la IA
Por un lado, ayuda a determinar la autoría y los derechos aplicables a las obras. Por otro, permite diferenciar entre uso legítimo y posibles desinformaciones.
La inteligencia artificial se está extendiendo con fuerza, incluyendo la popularización de la IA generativa que es capaz de crear contenido por su cuenta. Esto puede potenciar la productividad empresarial, pero también tiene sus desventajas. Una de las más notables es que abre las puertas a usos maliciosos y la propagación de información falsa.
Los textos e imágenes desarrollados con IA pueden resultar indistinguibles de los que tienen un origen humano. Para los usuarios será cada vez más difícil diferenciar entre aquello creado en base a algoritmos y elementos más auténticos.
Para ayudar a discernir, Safe Creative ha puesto en marcha un servicio que encara precisamente la preocupación creciente por la veracidad y la autoría de los contenidos. Se trata de la declaración responsable de la creatividad, que permite conocer de forma transparente quién está detrás de la información que se muestra en fotografías, artículos u otras obras.
Safe Creative se adelanta así a las recomendaciones de la Comisión Europea y medidas legislativas que podrían surgir para combatir los efectos negativos de la IA.
“La declaración responsable de la creatividad ha sido diseñada para resolver dos grandes retos que plantea la IA generativa”, señala Juan Palacio, cofundador y CEO de Safe Creative.
“Por un lado”, explica, “favorecer el uso ético y legal de contenidos generados por IA. Estos, son útiles para autores y artistas, pero emplearlos para difundir noticias falsas o desinformación es preocupante y generalmente ilegal”, así que resulta “fundamental diferenciar los usos legítimos y creativos de estos contenidos de los socialmente perversos“.
“Por otra parte”, continúa, “esta solución permite determinar la atribución de autoría y los derechos aplicables a las obras, lo que contribuye a resolver otro problema: la dificultad para determinar si una obra es una creación humana o no y, en consecuencia, si está sujeta a derechos y limitaciones de uso copia y distribución en determinadas legislaciones”.
“Estamos plenamente alineados con las recomendaciones en curso y el espíritu de la normativa que está por llegar”, afirma el directivo, que reconoce que “determinar quién se atribuye la autoría de una obra y qué derechos le corresponden se ha vuelto una tarea compleja, que requiere de una solución TI”.
Safe Creative ha activado en su registro una etiqueta de declaración responsable de creatividad que permitirá a los creadores determinar la veracidad de sus contenidos y si participa de algún modo la tecnología. Y, más en concreto, si es ficción o realidad, cuál ha sido el proceso creativo y la identidad del declarante, además del grado de trazabilidad.
