– Además del trabajo en este mercado, ¿cuáles son las principales previsiones para el próximo ejercicio? Nuestro principal reto, pero también nuestra principal oportunidad para los próximos años es continuar trasladando nuestro liderazgo en el mercado español a los mercados internacionales y convertirnos en un actor global en los principales mercados de ámbito mundial.
Para ello, Indra pretende continuar con su estrategia de creación de valor, con una oferta de soluciones y servicios que supone un modelo de gestión global de las necesidades del cliente, desde el diseño de una solución, pasando por su desarrollo e implantación, hasta su gestión operativa.
– En este sentido, la economía mundial empieza a dar síntomas de agotamiento y la recesión es cada vez más evidente. ¿Consideran que este contexto perjudicará al sector TI en general y a Indra en particular? Hasta ahora, el mercado de servicios de TI no está dando muestras de desaceleración ante la incertidumbre económica. Las bases de la demanda son sólidas e incluso en un contexto de crisis económica la demanda de TI podría verse beneficiada por las iniciativas de reducciones de costes de las empresas, que impulsarían particularmente la demanda de servicios de outsourcing.
Además, consideramos que Indra cuenta con una estructura de mercados verticales equilibrada y diversificada, que combina negocios que aportan una mayor estabilidad a largo plazo con otros que tienen un elevado potencial de crecimiento y que, por lo tanto, hacen que Indra sea menos vulnerable a los ciclos económicos.