“El nivel tecnológico y de demanda que existe en España afronta la misma exigencia de cualquier otro país”

El consejero delegado y director general de Océ-España, Casimir Alonso, explica cómo la inversión en investigación y desarrollo han sido claves en el devenir histórico de su empresa que, tras 150 años en el mercado, es una de las compañías líderes de su sector.
“Océ ha ido liderando diversos cambios que se han producido en el mundo de la gestión documental”, apunta.
Desde la perspectiva que da su cargo al frente de la filial ibérica, Alonso defiende que el mercado español afronta “el mismo nivel de exigencia” que los de otros países. “España habla de tú a tú a los otros países y estamos justo al mismo nivel”.
– Tras 150 años de trayectoria, Océ es una de las compañías líderes en el mercado. ¿Cuáles son las claves de este éxito?
Océ es una empresa con una trayectoria muy larga y además siempre ha estado volcada en la innovación, dedicando entre un 7 y un 8 por ciento de sus ingresos a I+D y eso ha facilitado contar con un altísimo número de patentes.La compañía ha ido liderando diversos cambios que se han producido en el mundo de la gestión documental. Ésta es la primera base.
La segunda es posiblemente la tradición. Océ es una empresa que cuida mucho la calidad de servicio y entiende que una solución no vale nada si no incorpora un servicio de altísima calidad, lo que le ha permitido mantenerse e incluso sin ser líder de precios en el mercado, llegar a conseguir unas cuotas de mercado muy significativas.
Y la tercera clave es más reciente, y aquí posiblemente impacta la idiosincrasia europea de la compañía, ha sido nuestra vocación de sostenibilidad y cuidado del medio ambiente. Océ tiene una alta RSC en el tema del medio ambiental, precisamente en un sector como éste que no ha sido de los punteros en la preocupación por este aspecto.

– ¿Cuáles son algunas de estas medidas para la protección del medio ambiente dentro del producto final que recibe el usuario?
Océ cubre todo el ciclo de vida. El diseño de cualquier producto tiene en cuenta cómo va a ser la reciclabilidad de ese producto, es decir, como vamos a hacer primero para que en la fabricación tengamos el menor impacto posible en el medioambiente y después de la vida útil cómo se hace para que este producto se reintegre en la naturaleza sin dañarla.