La importancia de las APIs para el desarrollo de la Industria 4.0

Desde Eaton destacan que “permiten un increíble ahorro de tiempo y de recursos en el sector industrial al facilitar el uso de infraestructuras, funciones y software ya existentes en nuevas plataformas, sin necesidad de volver a diseñarlas”

La economía de las APIs, siglas de “interfaz de programación de aplicaciones”, tiene unas previsiones de crecimiento de doble dígito para los próximos tiempos. Estudios de empresas como MarketsandMarkets calculan que pasará de mover 1 200 millones (cifra de 2018) a 5 100 millones de dólares en 2023.

Su utilidad se entiende dentro de un entorno dominado por los datos y la conectividad, donde también entra el sector industrial, que está adoptando cada vez más tecnologías emergentes como la nube, la inteligencia artificial o el internet de las cosas para dar vida a la fábrica conectada. Eso sí, en España todavía son mayoría (68 %) las compañías industriales con un grado de digitalización medio o bajo, según datos de PwC.

Esto debería ir cambiando. Las APIs favorecerán, de acuerdo con los expertos, un impulso importante en la consolidación de la Industria 4.0

“La digitalización e integración de toda la cadena de valor requiere dejar atrás los sistemas aislados y monolíticos, y adoptar un mismo estándar que permita alcanzar la conectividad rentable. Alcanzar el paradigma de la Industria 4.0, o fábrica inteligente, supone un desafío que va mucho más allá de la mera adquisición de nuevas tecnologías. La aproximación correcta requiere que dejemos de trabajar en silos para abrazar un sistema de comunicación común capaz de integrar de forma ágil todos los procesos en la fábrica”, explica Román Cazorla, responsable del segmento MOEM en Eaton.

“En un panorama dominado por el dato, las APIs representan la oportunidad que nos va a permitir desarrollar con éxito este proceso”, asegura.

¿Por qué? Porque “las APIs permiten un increíble ahorro de tiempo y de recursos en el sector industrial al facilitar el uso de infraestructuras, funciones y software ya existentes en nuevas plataformas, sin necesidad de volver a diseñarlas“. Para Cazorla “esta es la única forma de acercarnos realmente a la Industria 4.0. Ciertamente el IIoT” o internet de las cosas industrial “es esencial, pero lo es todavía más su integración total en la cadena, de forma que pueda desplegar su máximo potencial en todas sus variantes y siempre con garantías de éxito gracias a la exactitud que se deriva de un buen sistema de información entre dispositivos, máquinas y trabajadores, tanto internos como externos”.