Puntos a favor y en contra del avance de los ‘wearables’ para la salud

Juniper Research advierte de que “es vital que los pacientes conozcan cómo se utilizarán sus datos personales”.

La previsión de Juniper Research sobre wearables de salud, entre los que incluyen rastreadores y dispositivos para la monitorización remota de pacientes, es que en 2023 acumulen un gasto de 20.000 millones de dólares.

Es decir, se conviertirán en algo imprescindible para la asistencia médica.

Juniper Research también apunta que los hearables o audífonos conectados serán importantes. Entre unas cosas y otras se debería llegar hasta los 60.000 millones de dólares.

A su favor este segmento cuenta con el avance en la tecnología para controlar enfermos a distancia. Para 2023 se espera que los proveedores de atención médica controlen a 5 millones de personas en remoto. Asimismo, influye la capacidad de análisis con ayuda de inteligencia artificial, lo que permitirá identificar individuos en riesgo de empeoramiento.

Un desafío, por otro lado, será la privacidad y la anonimización de los datos y el tema del consentimiento.

“Es vital que los pacientes conozcan cómo se utilizarán sus datos personales. De lo contrario, hacer de los wearables un ‘must have’ para brindar atención personalizada o recibir seguro médico tiene como riesgo una reacción negativa por parte de los pacientes y un mayor control regulatorio”, comenta al respecto el investigador Michael Larner, “paralizando la efectividad de la monitorización remota”.

Si todo va tal y como se espera, los ingresos por servicios que tienen que ver con los datos y los dispositivos de monitorización llegarán hasta los 855 millones de dólares en 2023.