Recomendaciones para sacar provecho a la IA en la empresa

ARBENTIA destaca la importancia de integrar la inteligencia artificial generativa y conversacional en el ecosistema de gestión.

La inteligencia artificial (IA) continuará ganando presencia en 2024, de acuerdo con los expertos en tecnología. El año que viene se dejarán atrás las pruebas de concepto y comenzarán los despliegues reales en los negocios.

Así lo prevé la consultora ARBENTIA, que tiene perspectivas halagüeñas para el año que viene y que ofrece una serie de recomendaciones para alcanzar un valor real.

Esto comienza por la integración de la IA generativa y la IA conversacional en el ecosistema de gestión. Ambas tecnologías deben comunicarse con los sistemas internos transaccionales de datos de clientes, empleados o productos, así como con bases de datos no estructurados procedentes de páginas web y redes sociales corporativas.

“La fusión explosiva de la IA conversacional –basada en el lenguaje natural- y la IA generativa están planteando un modelo completamente nuevo en la interacción entre personas y tecnología en el ámbito laboral”, apunta Daniel Taboada, CEO de ARBENTIA.

“El siguiente paso para el óptimo aprovechamiento de estas tecnologías, sin embargo, será su correcta integración con los sistemas y datos empresariales: condición sine qua non para conseguir que la IA genere un impacto realmente significativo y medible para los negocios”, subraya.

“El reto suele ser no sólo tecnológico, sino de aplicación y gestión del cambio”, indica. Y es que, “a pesar de su incuestionable potencial, el aterrizaje efectivo de la IA generativa y conversacional en los negocios a veces resulta más difícil de lo que parece”.

ARBENTIA aconseja “empezar con despliegues acotados en procesos y casos de uso específicos, involucrando a los usuarios y planteando un modelo de ejecución que permita reducir los tiempos hasta la obtención de valor, además de apoyarse en partners de confianza y con experiencia”.

Las aplicaciones de chatbot impulsadas por IA alcanzan áreas como los Recursos Humanos, el marketing y las ventas o el soporte, con impacto en la alta dirección y la experiencia de usuarios y clientes.

Para que el despliegue de los proyectos de IA tengan éxito, otro aspecto fundamental será la formación de los empleados. Además, las empresas no pueden ignorar el aspecto social de esta tecnología y su capacidad para analizar tanto el contenido de la información recabada como el sentimiento.

A todo esto hay que sumarle la importancia de la seguridad, con un control del factor interno y la aplicación ética de las herramientas. Los profesionales contratados necesitarán entender que la IA no es una amenaza para ellos, sino una oportunidad.