España, diez puntos por encima de la media europea en uso de arquitecturas de nube híbrida

IDC y Evolutio colaboran en l estudio “Technology Spotlight: almacenamiento digital como habilitador de la competitividad de las organizaciones”.

La nube triunfa entre las empresas españolas. El estudio “Technology Spotlight: almacenamiento digital como habilitador de la competitividad de las organizaciones” de IDC España patrocinado por Evolutio explica cómo el enfoque preferido para la infraestructura de almacenamiento en nuestro país es el multiccloud híbrido.

Respecto al de países europeos analizados, España está diez puntos por encima de la media en uso de arquitecturas de nube híbrida.

IDC espera que el uso de la infraestructura como servicio suponga dos quintas partes del mercado nacional dentro de tres años, con la gestión de la nube híbrida siendo un área importante de inversión.

Capacidades como FinOps y CloudOps están ganando presencia y contribuyendo a la optimización de costes y otras áreas como la disponibilidad, la flexibilidad, la seguridad o la movilidad de los datos.

“Las ventajas de la nube híbrida, en el contexto de incertidumbre actual, permiten a las empresas y organismos públicos incorporar resiliencia y agilidad a sus procesos y operaciones, mejorando su planificación y adquiriendo todas las capacidades necesarias para afrontar distintos escenarios”, declara Mario Reiter, Chief Sales & Marketing Officer en Evolutio, “incluyendo disrupciones que afecten a sus procesos más críticos”.

Otra previsión que deja el informe es que la inversión en infraestructura digital del mercado español para 2026, como base para la moderización, superará los 3800 millones de euros.

Para ese año, un 65 % de los compradores de tecnología priorizará el as-a-service para comprar infraestructura y contener el crecimiento del gasto TI. Esto también ayudará a combatir el déficit de talento

Entre los retos de gestión de infraestructuras digitales destaca el gran volumen de datos que existe y que en el próximo lustro será ya el doble del que se ha generado en la última década.

Las compañías responden moviendo sus cargas de trabajo desde entornos on-premise a la nube pública, pero también a la nube privada, a la nube híbrida, al espacio multinube y a los contenedores.

Si todo va según lo previsto, el año que viene más de la mitad de las cargas de trabajo de las empresas se ejecutarán en contenedores.

De cara al futuro, y por causa de la digitalización y su impacto en la infraestructura, el almacenamiento se convertirá en pilar fundamental de las estrategias empresariales. Será más un habilitador que una barrera. En este 2023 un 65% de las organizaciones ya está incrementando sus inversiones en almacenamiento.

Estas inversiones permitirán avanzar en cuestión de seguridad de los datos, acceso flexible, reducción de costes y eficiencia operativa.