8 fuerzas disruptivas a tener en cuenta para evitar desfases en el gasto de TI

El Internet de las Cosas, el cloud computing y la movilidad son sólo tres de las tendencias que los responsables de gestión de activos de TI deben vigilar para curarse en salud, según Gartner.

La reducción de costes de TI es una de las tres máximas prioridades de las empresas, aunque la consecución de ese objetivo se complica cada vez más.

Ttecnologia-TI-ITanto es así que Gartner habla de “ocho fuerzas disruptivas” que todo responsable de gestión de activos de TI debería “manejar de forma proactiva” si no quiere provocar que el gasto se dispare.

¿Qué fuerzas son ésas?

1. El Internet de las Cosas, que con el paso del tiempo va sumando más y más objetos a su red de dispositivos conectados, pero que aumenta asimismo el concepto de pago por licencias.

2. El típico gasto de mantenimiento. O, más bien, los incesantes incrementos de las cuotas de mantenimiento por parte de los proveedores de software, que les otorga el 85% de sus ganancias y casi la mitad de sus ingresos.

3. Las auditorías de software, un trámite necesario que se está intensificando y dificultando. Se calcula que seis de cada diez empresas son examinadas al menos una vez al año.

4. El cloud computing. La nube es negocio al que hay subirse con cabeza. Es necesario comparar ventajas pero también riesgos respecto a los servicios tradicionales, como el de derivación, la propia gestión y los costes ocultos.

5. El ecosistema móvil y las tiendas de aplicaciones, donde intervienen una gran cantidad de participantes, todos ellos con sus propias reglas, sistemas operativos y diferente atractivo según las necesidades concretas de cada organización.

6. La virtualización, un mundo al que los directivos todavía no le han cogido el truco debido a las cambiantes y complejas cláusulas contractuales, especialmente en el espacio del escritorio.

7. El Big Data ha llegado para quedarse, porque las necesidades de almacenamiento y gestión de grandes cantidades de información irán a más. Esto enrevesa, consecuentemente, el sistema de licencias.

8. El BYOD (o el fenómeno de llevar los dispositivos personales a la oficina) que, como todo, trae beneficios pero también inconvenientes. ¿Por ejemplo? Una mayor y necesaria inversión en seguridad.