La Comisión Europea anuncia una revisión a fondo de la fusión Orange-MásMóvil

La fusión de Orange y MásMóvil supondrá la creación de una compañía con una cuota de mercado del 34 %

La Comisión Europea ha anunciado que va a revisar en profundidad la fusión entre la compañía francesa de telecomunicaciones Orange y la española MásMóvil. Según ha informado la agencia Reuters, esta revisión se llevará a cabo para determinar si la operación cumple con las normas de competencia de la Unión Europea.

La fusión entre Orange y MásMóvil fue anunciada en febrero de 2023 y se espera que se complete a finales de año. La operación dará lugar a una compañía con una cuota de mercado del 34 % en España, lo que la convertiría en la segunda mayor compañía de telecomunicaciones del país por detrás de Telefónica.

La Comisión Europea ha confirmado que ha iniciado una revisión detallada de la operación para determinar si esta puede tener un impacto negativo en la competencia en el mercado de las telecomunicaciones en España. La revisión se llevará a cabo bajo las normas de la UE en materia de control de concentraciones.

Posibles efectos de la fusión

La revisión de la Comisión Europea se centrará en los efectos que la fusión puede tener en el mercado de la banda ancha fija y móvil, así como en el mercado de la televisión de pago. También se evaluará el impacto que la operación puede tener en los precios y la calidad de los servicios ofrecidos a los consumidores.

La Comisión Europea tiene un plazo de hasta 90 días hábiles para completar su revisión detallada de la operación. Durante este período la Comisión puede solicitar información adicional a las compañías involucradas en la fusión y a otros actores del mercado.

La fusión entre Orange y MásMóvil ha sido criticada por algunos de los competidores de ambas compañías. Concretamente Telefónica ha expresado su preocupación por el aumento de la cuota de mercado de la nueva compañía resultante de la fusión. En respuesta a estas críticas, Orange y MásMóvil han destacado que la fusión no tendrá un impacto negativo en la competencia y que la nueva compañía resultante de la fusión seguirá compitiendo de manera efectiva en el mercado.

En cualquier caso la revisión en profundidad de la Comisión Europea supone un obstáculo adicional para la finalización de la fusión. Si la Comisión Europea determina que la operación no cumple con las normas de competencia de la UE podría imponer medidas correctivas o incluso bloquear la operación.