Consecuencias negativas del teletrabajo: estafas laborales

Las estafas laborales relacionadas con el teletrabajo se suelen propagar a través de anuncios online, redes sociales y, en ocasiones, incluso en plataformas legítimas de búsqueda de empleo

El teletrabajo, impulsado en gran medida por la pandemia del COVID-19, se ha convertido en una modalidad laboral que ha transformado significativamente el panorama laboral en los últimos años. De acuerdo con el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI), en 2022 se contabilizaron 2,56 millones de personas teletrabajando en España, marcando así una tendencia en constante crecimiento.

En la actualidad el trabajo remoto ha ganado terreno como una de las opciones laborales más solicitadas por los trabajadores. Un estudio conjunto realizado por ManpowerGroup, LLYC zityhub y The Move, denominado ‘”El Impacto de lo Híbrido'” reveló que el 89 % de los encuestados esperaba que sus empleos ofrecieran modalidades de trabajo parcialmente remoto después de la pandemia.

En este contexto, Josep Albors, director de Investigación y Concienciación de ESET España, empresa especializada en ciberseguridad, destaca que el teletrabajo no solo ofrece la ventaja de trabajar desde casa, mejorando la conciliación familiar y otros aspectos, sino que también brinda a los profesionales la oportunidad de obtener ingresos adicionales y acceder a mejores oportunidades laborales, incluso en empresas extranjeras. No obstante Albors advierte que esta era de trabajo globalizado también ha sido aprovechada por ciberdelincuentes para perpetrar estafas a través de ofertas laborales en remoto fraudulentas.

Estafas laborales

Un ejemplo preocupante se encuentra en Estados Unidos, donde aproximadamente 93.000 personas denunciaron estafas relacionadas con oportunidades laborales y de negocios el año pasado. Estas estafas resultaron en pérdidas promedio de alrededor de 2.000 dólares, convirtiéndolas en el segundo tipo de fraude más común después de las estafas de inversión.

Las estafas laborales relacionadas con el teletrabajo se suelen propagar a través de anuncios online, redes sociales y, en ocasiones, incluso en plataformas legítimas de búsqueda de empleo como LinkedIn. ESET, como empresa especializada en ciberseguridad, ha identificado algunas de las amenazas más comunes en el ámbito laboral remoto:

  • Reenvío: Los estafadores contratan a víctimas para recibir paquetes y reenviarlos a otro destino. Sin embargo estas personas están involucradas en el envío de bienes robados adquiridos mediante datos financieros comprometidos.
  • Comprador misterioso o falso: Las víctimas son contratadas para comprar productos y evaluar la experiencia de compra. Sin embargo, los cheques proporcionados para cubrir los gastos son denegados.
  • Falsos asistentes personales: Los estafadores contratan a usuarios como asistentes personales para hacer compras en su nombre. Se les envía un cheque para cubrir los gastos, pero luego se les pide devolver parte del dinero, mientras que el cheque original resulta ser inválido.
  • Creación de una empresa propia: Los estafadores ofrecen recursos para ayudar a las víctimas a emprender, pero cobran por materiales inútiles.
  • Facturación médica: Los estafadores prometen puestos de facturación médica que no requieren capacitación, pero exigen pagos por costosos cursos y certificaciones.
  • Ofertas de empleo fraudulentas: Los estafadores publican ofertas de trabajo inexistentes con el objetivo de obtener información personal de los solicitantes.
  • Montaje de productos: Las víctimas son contratadas para ensamblar productos y enviarlos a su empleador, pero se les pide pagar por adelantado un kit de inicio. Pronto se dan cuenta de que han sido estafados.
  • Estafas MLM: Algunas oportunidades de marketing multinivel resultan ser estafas, donde se prometen comisiones por reclutar a otros y vender productos.

Para protegerse de estas estafas, ESET ha proporcionado una serie de recomendaciones. Antes de aceptar una oferta de trabajo se sugiere investigar si la empresa tiene reseñas negativas online y buscar la validación de organismos de protección al consumidor. Hacer preguntas detalladas al empleador y desconfiar de ofertas que parezcan demasiado buenas para ser ciertas son prácticas importantes. También se insta a no dar por sentado que un anuncio es auténtico sólo porque se encuentra en un sitio legítimo, y a evitar responder a comunicaciones no solicitadas o hacer clic en enlaces desconocidos.