Facebook se enfrenta a una demanda por monopolio por las compras de Instagram y WhatsApp

La FTC también denuncia la imposición de condiciones anticompetitivas a los desarrolladores de aplicaciones a la hora para acceder a sus APIs.

Las adquisiciones de Instagram, primero, y de WhatsApp, después, por parte de Facebook podrían acabar revirtiéndose.

En su momento acapararon titulares. Con el tiempo le han reportado millones de usuarios alrededor del mundo y dinero. Pero la Comisión Federal de Comercio (FTC) de los Estados Unidos, la autoridad sobre competencia y protección del consumidor en el país norteamericano, acaba de demandar a la compañía que dirige Mark Zuckerberg por monopolio. En su denuncia explica que Facebook está “manteniendo ilegalmente su monopolio de redes sociales personales” con una “conducta anticompetitiva” que lleva años vigente.

La FTC apunta directamente a esas compras de grandes rivales en el campo de las plataformas sociales y la mensajería instantánea, que se produjeron en 2012 y 2014. Su conclusión es que Instagram y WhatsApp amenazaban el poder de Facebook y esta, en vez de plantear ofertas alternativas, optó por sacar la billetera y hacerse con su propiedad. Esto habría dificultado que sus rivales directos ganasen escala.

Pero la denuncia también habla de una supuesta imposición de condiciones anticompetitivas a los desarrolladores de software a la hora de acceder a APIs para que sus aplicaciones interactúen con Facebook. Habría impedido, por ejemplo, la conexión y la promoción de otras redes sociales.

En su comunicado sobre este caso, la FTC dice que en alguna ocasión se cortó el acceso, como le sucedió en 2013 a Vine, la aplicación de vídeos cortos de Twitter.

En base a estas observaciones, determina que la actuación de Facebook “perjudica a la competencia, deja a los consumidores con pocas opciones en redes sociales personales y priva a los anunciantes de los beneficios de la competencia”.

Revertir las adquisiciones

“Las redes sociales personales son fundamentales para la vida de millones de estadounidenses”, indica Ian Conner, director de la Oficina de Competencia de la FTC. “Las acciones de Facebook para afianzar y mantener su monopolio niegan a los consumidores los beneficios de la competencia. Nuestro objetivo es revertir la conducta anticompetitiva de Facebook y restaurar la competencia para que la innovación y la libre competencia puedan prosperar”.

En concreto, el objetivo es que un tribunal ordene la venta de Instagram y WhatsApp y prohíba a Facebook la imposición de condiciones anticompetitivas a terceros. También se pretende que la compañía solicite notificación y aprobación previas para futuras operaciones.

La FTC no está sola en esta batalla. Su denuncia llega tras una colaboración con los fiscales de 46 Estados, el Distrito de Columbia y Guam.

Todos ellos consideran que Facebook ha adoptado “una estrategia sistemática” para “deshacerse de cualquier amenaza a su monopolio”.

La posición de dominio actual que ostenta la compañía de Zuckerberg le habría reportado cuantiosos ingresos y ganancias, que el año pasado sobrepasaron los 70 000 millones y los 18 500 millones de dólares, respectivamente.